Inteligencia artificial: ¿Qué futuro para las profesiones del diseño?

Apenas llegadas a las profesiones creativas, las IA están comenzando a sacudir las prácticas de los diseñadores. En pocos meses, nuevas herramientas de inteligencia artificial para generar imágenes a partir de textos han despertado curiosidad y han asombrado con sus resultados. Losa, diseñado por la empresa americana OpenAI, y Medio viaje, disponible en los mensajes de Discord, ha sido un éxito deslumbrante. Gran cantidad de producciones, calidad de imagen sorprendente, técnica profesional, rapidez… Las IA hacen en segundos un trabajo que un profesional tardaría días en hacer. Estas herramientas despiertan tanto entusiasmo como preocupación.

Diseñador y co-fundador ediciones Volumiques, que producen libros y juegos interactivos, Etienne Mineur se interesa mucho por estas herramientas que plantean preguntas. Durante una conferencia educativa en Intuit Lab Paris, ilustró a los estudiantes sobre los usos de estas IA, sus ventajas y sus desventajas. ¿Cómo puede un diseñador domar la IA de la manera correcta? "Ese te permite abrir caminos hacia los que no hubieras pensado ir, te abre posibilidades”, explica Etienne Mineur sobre esta herramienta que te permite crear rápidamente tableros de estilo y dejarte sorprender por ideas creativas.

Intuit Lab tiene muchos campus en Francia y en todo el mundo. de un escuela de diseño de marsella, a la India vía Brasil, Intuit Lab puede hacerte viajar mientras te enseña los oficios del Diseño. Así que no lo dudes más y súmate a la aventura.

“Después de la posición que debemos tener, es que nosotros somos los que guiamos a la IA para que presente una imagen interesante en algún momento. De lo contrario, es demasiado fácil, es un flujo de imágenes que fluyen”, agrega. La etapa de producción se reduce a favor de más tiempo dedicado a la elección de las imágenes. Si bien las imágenes generadas por IA ya tienen un aspecto “terminado”, el desafío también será ser un educador sobre su lugar en el proceso creativo. A diferencia de los no profesionales que utilizarán estas imágenes sin retocarlas, los profesionales tendrán que aportar su propia estética, utilícelos a su manera. La IA se está convirtiendo en una herramienta como cualquier otra. 

“Tenemos que lograr entrenarlo. Lo logramos aguzando la vista, teniendo una cultura visual, referentes. Diseñadores, diseñadores gráficos y directores de arte tendrán que cultivarse aún más para poder dialogar con una máquina que tiene todas las referencias.. y luego tomar una decisión informada. Es realmente una receta de cocina”, explica Etienne Mineur, para quien la IA empujará a los profesionales a mostrar más originalidad para destacar. 

Para evitar caer en la trampa de la estandarización de la IA, los profesionales deberán “Ir y venir entre la IA y su práctica tradicional” :: “Si solo te sumerges en la IA, corres el riesgo de caer en la normalización. Es como en la cocina donde puedes hacer un plato que se ve muy bien y luego fácilmente que no es tan excepcional cuando lo pruebas. Es este lado fanfarrón de las IA”. Sesgos algorítmicos de la IA también son riesgos que deben evitarse. La visión del mundo de la herramienta se basa en datos de algoritmos, y no sorprende que refleje una imagen muy estereotipada y llena de prejuicios de nuestra sociedad mientras magnifica sus males. 

“La IA puede proporcionar emoción, pero somos nosotros quienes la proyectamos sobre ella. IA simula. Cosas como empatía, sentido común, ella no lo tiene. Tendremos que centrarnos en las cosas donde es menos bueno que nosotros”, asegura sobre esta herramienta que poco a poco se irá integrando en las prácticas. Interviniendo al comienzo de las etapas de producción, la IA es, sin embargo, una fuente de preocupación para las profesiones presentes en estas etapas. 

Para visualizar el futuro con estas herramientas de inteligencia artificial, las escuelas tienen un papel que desempeñar. " Depende de los estudiantes imaginar el futuro y las nuevas prácticas. A menudo, los diseñadores mayores, que quieren estar menos interesados ​​en la IA, no quieren intentarlo. En las escuelas, los alumnos van a tener tiempo para experimentar, sin tener el muro del cliente, el dinero y el plazo”. La pelota está en el campo de los estudiantes.